
¿A quién le gustan los dulces? Manzanas dulces, como nuestra favorita Fuji, son naturalmente altos en azúcar: cuanto mayor es el contenido de azúcar, más domina cualquier acidez agria. ¿Sabías que todas las manzanas se vuelven más dulces con el tiempo? Los almidones se convierten en azúcar mientras la fruta está almacenada, alterando gradualmente el sabor.